Derecho al olvido
14 noviembre 2016
El derecho al olvido ampara la capacidad de una persona para borrar en Internet información irrelevante sobre sí misma y preservar de ese modo su privacidad. Reforzar la protección de los datos de los ciudadanos y adaptar las viejas normas al entorno virtual, donde los documentos tienen un alcance no sólo global sino eterno, es algo a lo que todos tenemos derecho. En mayo de 2014, el Tribunal de Justicia de la Unión Europea emitía una sentencia por la cual obligaba a Google a bloquear el acceso a la información de un usuario, si así lo deseaba éste. Era la primera vez que se hacía alusión al derecho al olvido en relación a este buscador.
Desde entonces, unas 170 sentencias españolas hablan de este derecho creando, de esta manera, un nuevo debate sobre si todo lo que publicamos en Internet se queda en la nube de una manera u otra. Según la Agencia Española de Protección de Datos:
“El derecho fundamental a la protección de datos reconoce al ciudadano la facultad de controlar sus datos personales y la capacidad para disponer y decidir sobre los mismos.”
Estos conceptos son muy importantes para las nuevas generaciones ya que creen que la vida debe ser cuanto más pública mejor y olvidan los riesgos que supone la pérdida por completo de tu vida privada. Desindexar información de Internet no es un proceso sencillo, pero la responsabilidad de solicitar la retirada de información de la red es algo que deben hacer los usuarios. Dejar atrás información del pasado es un proceso lento.
¿Qué hay después de la vida 2.0?
¿Qué pasa con las redes sociales de una persona fallecida? ¿Es posible eliminar de manera definitiva ese perfil? En este sentido, nos encontramos con redes sociales que nos ofrecen soluciones completas específicas para desaparecer de ellas sin dejar rastro alguno.
- Facebook, es uno de los sitios más preparados para los casos de gente que ha fallecido en donde se crean las cuentas “In memorian”. Desde un sencillo formulario podemos ocultar datos de una persona y desactivar las apariciones en las búsquedas en la red.
Para realizar este proceso necesitaremos datos de la persona fallecida como su nombre o dirección de email así como algún tipo de prueba fiable de la defunción d de dicha persona. Los familiares directos también pueden contactar con Facebook y hacer que se borren todos los datos de la persona fallecida. - Google permite que determinados usuarios puedan solicitar la eliminación de sus datos en los motores de búsqueda, solo si la privacidad de la persona está por encima de los intereses. El derecho al olvido de este buscador es muy relativo.
Actualmente, el derecho al olvido se ha extendido también a las búsquedas internacionales. ¿Y si nuestro nombre aparece en Google.com ligado a algo que no queremos? Según la Agencia Española de Protección de Datos, estas sentencia de derecho al olvido implican también la eliminación de tus datos en dominios .com, lo que es el territorio europeo.
Los medios de comunicación juegan un papel fundamental dentro del derecho al olvido y el derecho a la información. La retirada de información también en diarios digitales sobre una persona es un frente que sigue abierto.
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