La antiestrategia: cómo cuidar y mimar a tus clientes

25 abril 2019

¿Sabías qué es diez veces más caro conseguir un nuevo cliente que mantener a uno que ya tenemos? Teniendo en cuenta este dato, en morgan media sabemos de la importancia de cuidar a nuestros clientes desde que establecen una relación comercial con nosotros. Y para eso, llevamos a cabo lo que nosotros llamamos “la antiestrategia”. ¿Y en qué consiste? No lo vamos a contar porque es nuestro secreto, pero sí te vamos a dar unas pinceladas que se han convertido en nuestra seña de identidad.

 

No hacemos mailing

 

 

Una de las cosas de las que nos sentimos más orgullosos en morgan media es que disponemos de las herramientas necesarias para automatizar determinadas tareas, como el envío de informes o la firma online de contratos. Pero eso no quiere decir que prescindamos de un equipo humano. Todas las estrategias y las acciones que llevamos a cabo las realizan profesionales de cada área del marketing online.

Ahora bien, ¿qué quiere decir esto? Cada uno de nuestros clientes tiene asignado un comercial de confianza con el que tiene una comunicación fluida y natural. Por eso, no enviamos emails de forma masiva ni contamos con una newsletter. Los emails que enviamos están redactados por cada una de las personas que trabajan en morgan media y tienen como fin mejorar el servicio que damos, resolver dudas, etc.

 

No hacemos llamadas de ventas

 

 

Cuando tienes una buena estrategia de marketing, los leads llegan a ti sin que tengas que ir buscarlos. En morgan media no hacemos llamadas de ventas porque no creamos una necesidad al cliente. El cliente ya tiene esa necesidad y es quien acude a nosotros.

¿Esto quiere decir que nunca llamamos? Hacemos todas las llamadas que sean necesarias para que el cliente se sienta como en casa, tenga claro cómo trabajamos, cómo podemos ayudarlo y que reciba el asesoramiento que necesita. Al igual que en el punto anterior, en el que detrás de cada email hay una persona, aquí pasa lo mismo. Nuestros clientes nunca hablan con máquinas ni mantienen conversaciones guionizadas. El trato es y siempre será personalizado.

 

No hacemos estrategias generales

 

 

El alcance de nuestros productos ya está establecido, sí. Pero la estrategia que ponemos en marcha se adapta al presupuesto y las necesidades de cada uno de nuestros clientes. Está comprobado que trabajar de forma genérica y homogénea no da resultado, y menos a largo plazo.

Cuidamos y mimamos al cliente. Eso ya lo sabes. Por eso, en la parte más importante de nuestro trabajo no podíamos perder nuestra esencia. Además de diferenciarnos de nuestra competencia, es uno de nuestros rasgos que más valoran los clientes.

 

El índice de caída es ínfimo

 

 

El resultado de nuestra antiestrategia es un índice de caída ínfimo. Los clientes llegan a nosotros, escuchamos sus necesidades y les ofrecemos el servicio que mejor se adapta a su objetivo. Por otro lado, como no tenemos permanencia en nuestros contratos,  pueden irse cuando quieran. Pero eligen quedarse con nosotros porque hemos sido capaces de trasmitirles la confianza necesaria y tal nivel de implicación con su proyecto que les estamos ayudando a crecer.

 

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